La imagen corporativa son los aspectos que definen visualmente a una empresa. La imagen corporativa de una empresa es muy importante porque será la primera visión que tendremos del negocio antes de conocer los servicios que ofrecen en profundidad y la que nos haga que queramos conocer o no más de ella.
Si una empresa cuenta con una imagen corporativa clara y estable, afectará también a la marca.
Índice de Contenidos
Aspectos que componen la imagen corporativa de una marca
Los elementos que definen una imagen corporativa pueden llegar a ser infinitos, porque podemos profundizar en aspectos como el diseño de interiores de sus oficinas o la vestimenta de sus empleados, pero por norma general los que la suelen definir son el logotipo, los colores y las tipografías.
Hoy en Ferysu te explicamos en qué consiste cada elemento así como su aplicación.
Logotipo
El logotipo de un negocio es la base fundamental de la imagen de marca. No solamente se trata de un dibujo o del nombre de la empresa con una tipografía concreta, sino que muestra a simple vista quiénes somos o qué queremos transmitir. Los elementos que incluya el logotipo deben representar los valores que queremos transmitir.
Debemos tener muy claro estos valores así como la imagen que queremos mostrar tanto a nuestros clientes como a la competencia, para poder fidelizarnos a ella.
Muchas empresas cambian a lo largo de los años su logotipo para modernizarlo, pero algunas rompen la línea del diseño que lo define. Es recomendable decidir qué elementos del logo se quieren mantener y cuáles no. Es decir, que parte de ellos transmite la personalidad de la empresa y cuál es diseño.
Colores corporativos
Es esencial que una empresa cuente con una paleta de colores corporativos con los que se puedan jugar. Dentro de esta gama, existirá uno o dos colores corporativos principales que aparezcan en el logo. Es recomendable que estos colores sean puros cuando se empleen.
Cuando hablamos de colores corporativos no solo nos referimos a los colores exactos que podamos emplear, sino a la forma de combinarlos y el uso que tienen cada uno dentro de la imagen corporativa.
Podemos definir las diferentes secciones dentro de la empresa y jerarquías de información, como las que se emplean en los mapas y líneas del metro.
Tipografías corporativas
La tipografía es igual de importante que el logotipo o los colores a la hora de definir visualmente nuestra empresa.
Un error muy frecuente es pensar que la tipografía que aparece en el logotipo debe ser la tipografía principal de nuestra compañía. Muchas veces, en el diseño de logotipos, optamos por tipografías más modernas que no son tan útiles para otro tipo de textos.
Una buena forma de definir las tipografías es por usos, como los textos internos, títulos, etc. pero siempre buscando que tengan una coherencia entre ellas y con la imagen de empresa que queramos transmitir.
Debemos buscar un término medio entre el número de tipografías seleccionadas, porque si escogemos demasiadas podemos ofrecer una imagen confusa y poco definida, mientras que si no optamos por suficientes, usaremos tipografías poco apropiadas por no añadir más elementos a nuestra imagen corporativa.
Cuando hablamos de las tipografías corporativas de una empresa no solo son las fuentes escogidas, sino a todo lo que está relacionado con ellas como el tamaño, el interlineado o el estilo. Lo más recomendable es contar con una tipografía romana y otra de palo seco, para diferenciar entre la lectura en papel y la lectura en web.
Podemos encontrarnos con dos posibilidades, que diseñemos una imagen corporativa desde cero o que tengamos que trabajar sobre una que ya existe. En ambos casos, es un trabajo complicado y detallado, porque la identidad visual de una marca tiene pequeños detalles que deben ajustarse.
Manual corporativo
Es fundamental basarnos en un manual corporativo. Aunque puede resultar algo tedioso realizarlo, esto hará que se asienten las bases de la identidad visual de la empresa y resultará muy útil para todos aquellos que tengan que trabajar más adelante con la imagen de la empresa que se creó en un principio.